La estimulación de la médula espinal (SCS, por sus siglas en inglés) es una técnica médica que se usa para enviar pulsos eléctricos leves a los nervios a lo largo de la columna para modificar o bloquear las señales de dolor que llegan al cerebro.
El SCS se usó por primera vez para tratar el dolor en 1967 y luego fue aprobado para su uso por la Administración de Drogas y Alimentos de los EE. cirugía).
El dispositivo se implanta cerca de la columna vertebral y funciona de manera similar a un marcapasos cardíaco. En lugar de dolor, una persona normalmente sentirá una ligera sensación de hormigueo. Los sistemas más nuevos, como el sistema de estimulación Senza aprobado en 2015, han podido superar en gran medida este efecto.
El sistema SCS consta de cuatro componentes que trabajan juntos para proporcionar estimulación eléctrica a la fuente del dolor (también conocida como generador de dolor). La mayoría de los dispositivos hoy en día pesan un poco más de una onza y se componen de un generador de impulsos, cables eléctricos, un control remoto y un cargador de batería.