Manchado ligero después menopausia puede ser causado por algunas cosas diferentes, incluidos pólipos no cancerosos, sequedad vaginal o crecimiento excesivo del tejido que recubre el útero. Debido a que también puede ser un síntoma de cáncer de endometrio, un proveedor de atención médica siempre debe evaluar el manchado después de la menopausia.
Este artículo analiza las causas y los factores de riesgo asociados con el sangrado después de la menopausia.
Causas comunes
Cuando el sangrado ocurre después de la menopausia, se lo denomina sangrado posmenopáusico. Es relativamente raro; solo alrededor del 10% de las personas que han llegado a la menopausia experimentan sangrado posmenopáusico.
Hay varias causas comunes de manchado o sangrado leve después de la menopausia.
Atrofia vaginal y vulvar Ocurre cuando las paredes vaginales o la vulva (parte externa de los genitales femeninos) comienzan a adelgazarse y se secan e inflaman. Cuando esto sucede, una persona puede experimentar irritación o dolor en el área.
Es causada por una disminución de la hormona reproductiva femenina. estrógeno. Aunque puede ocurrir a cualquier edad, es más común después de la menopausia. Afecta hasta al 50% de las mujeres que han alcanzado esa etapa de salud reproductiva.
La atrofia vaginal y vulvar puede causar sangrado, aunque el manchado es más común durante las relaciones sexuales debido al aumento de la irritación en el área.
Tratamiento de la atrofia vaginal y vulvar
Por lo general, el tratamiento consiste en aliviar la irritación y restaurar la humedad en el área. Algunas opciones incluyen:
- Hidratantes
- Lubricantes
- Terapia hormonal para restaurar los niveles de estrógeno
- terapia con láser
pólipos
pólipos son crecimientos que pueden desarrollarse a partir de cualquier tejido del cuerpo. Por lo general, los pólipos no son cancerosos; sin embargo, tienen el potencial de transformarse en crecimientos cancerosos si no se tratan.
Los diversos tipos de pólipos que pueden desarrollarse y causar sangrado vaginal después de la menopausia incluyen:
- Pólipos endometriales (crecimientos adheridos a la pared interna del útero que se extienden hacia la cavidad uterina)
- Pólipos cervicales (crecimientos en el canal cervical, la parte inferior del útero)
Pólipos endometriales y riesgo de cáncer
Aunque es posible que los pólipos endometriales se conviertan en cáncer, el riesgo asociado con los pólipos endometriales posmenopáusicos es bajo, del 1,3 %.
Hiperplasia endometrial
Hiperplasia endometrial es una condición caracterizada por el crecimiento grueso de tejido endometrial que recubre el útero.
Después de que una persona llega a la menopausia, puede decidir someterse a ciertos tipos de terapias que aumentan sus niveles de estrógeno para hacer frente a los síntomas. Sin embargo, este estrógeno adicional en realidad puede provocar hiperplasia endometrial.
Este crecimiento excesivo y espeso de tejido endometrial puede provocar sangrado vaginal después de la menopausia porque el tejido debe eliminarse.
¿Por qué el estrógeno causa hiperplasia endometrial?
El estrógeno es la hormona reproductiva que hace que crezcan las células del revestimiento uterino. Cuando hay demasiado crecimiento debido al exceso de estrógeno, puede resultar en hiperplasia endometrial.
Cáncer endometrial
El cáncer de endometrio es un tipo de cáncer que se forma dentro del tejido endometrial. Según el Instituto Nacional del Cáncer, aproximadamente el 9 % de las personas menopáusicas fueron diagnosticadas con cáncer de endometrio después de experimentar sangrado vaginal.
Vale la pena señalar que, aunque la conexión entre el sangrado vaginal y el cáncer de endometrio es clara, la mayoría de las personas que tienen sangrado posmenopáusico no desarrollan la enfermedad.
Causas raras de manchado posmenopáusico
Hay muchas otras causas de manchado después de la menopausia. Algunos son fácilmente tratables, mientras que otros pueden requerir un tratamiento más extenso.
El sangrado posmenopáusico puede ser causado por:
Genética
La genética no influye en si una persona experimentará sangrado posmenopáusico. Sin embargo, algunas mujeres pueden ser más susceptibles a desarrollar cáncer de endometrio, que puede ir acompañado de sangrado vaginal en una pequeña cantidad de casos.
La mayoría de las personas que tienen sangrado vaginal posmenopáusico no desarrollarán cáncer de endometrio. Por lo tanto, la susceptibilidad genética al cáncer de endometrio no es un buen marcador de riesgo para el desarrollo de sangrado posmenopáusico.
Factores de riesgo
Los factores de riesgo asociados con el sangrado vaginal posmenopáusico no se conocen bien porque existen muchas causas subyacentes diferentes por las que ocurre. Según la investigación, el factor de riesgo más común era tener diabetes o hipertensión.
Resumen
El sangrado posmenopáusico no es normal y debe consultarse con un proveedor de atención médica. Algunas causas incluyen pólipos, atrofia vaginal y vulvar, hiperplasia endometrial, terapia de reemplazo de estrógenos y cáncer. Aunque muchos de estos no son graves, otros, como el cáncer, pueden poner en peligro la vida si no se detectan a tiempo y se tratan adecuadamente.
Los factores de riesgo más comunes para el sangrado posmenopáusico son condiciones preexistentes como diabetes e hipertensión. La genética no suele determinar si experimentará manchado después de haber entrado en la menopausia.
Una palabra de MEDSALUD
El manchado después de la menopausia puede ser alarmante, porque probablemente asumas que el sangrado vaginal ha quedado atrás. Si bien no debe preocuparse demasiado por eso, debe hacer que un proveedor de atención médica lo evalúe, ya que puede ser grave. Un proveedor puede identificar la causa y determinar las opciones de tratamiento para abordar el sangrado.