Los sofocos son períodos breves en los que una persona de repente siente calor y desarrolla sudoración y enrojecimiento, por lo general en la cara, el cuello y el pecho. Por lo general, duran de uno a cinco minutos y son más comunes en la menopausia. Alrededor del 75% de las personas menopáusicas experimentarán sofocos.

Los sofocos generalmente se tratan y controlan con cambios en el estilo de vida. Sin embargo, algunas personas con síntomas graves necesitarán terapia hormonal para controlar los sofocos. Afortunadamente, los sofocos menopáusicos duran menos de dos años para la mayoría de las personas.

Este artículo analiza las causas de los sofocos y cómo tratarlos.

Síntomas de los sofocos

Muchas personas experimentan sofocos además de otros síntomas de la menopausia. El signo principal de los sofocos es el aumento de la temperatura de la piel, especialmente alrededor de la cara, el cuello y el pecho. También puede experimentar:

  • Enrojecimiento o tinte rojo en la piel, similar al rubor
  • Transpiración
  • Sentirse muy cálido
  • Aceleración del corazón o palpitaciones del corazón
  • Mareo

Los síntomas de los sofocos generalmente aparecen repentinamente y se resuelven rápidamente. Los sofocos generalmente no duran más de cinco minutos. Aún así, su impacto puede ser significativo y muchas personas reportan pérdida de sueño debido a los sofocos que ocurren durante la noche, conocidos como sudores nocturnos.

Causas de los sofocos

Las causas comunes de los sofocos son:

  • Menopausia
  • Después del parto (postparto)
  • Emociones o ansiedad
  • comida o bebida
  • medicamentos

Menopausia

Los sofocos ocurren cuando el cuerpo responde a una ligera elevación de la temperatura central. Durante la menopausia, los niveles de la hormona estrógeno descienden significativamente. Los investigadores creen que esta caída hace que el cuerpo se vuelva más sensible incluso a las pequeñas regulaciones de temperatura.

Sofocos posparto

Los sofocos pueden ocurrir después de que una persona da a luz, especialmente si está amamantando. La lactancia materna bloquea la producción de estrógenos, poniendo a una persona en un estado similar a la menopausia. Es por eso que las personas que amamantan pueden experimentar síntomas como sofocos y sequedad vaginal.

Emociones o Ansiedad

Los estados elevados de emoción, nerviosismo y ansiedad pueden hacer que se sienta acalorado y sonrojado. También puede experimentar sudoración o un corazón acelerado.

Comida y bebida

Ciertos alimentos y bebidas pueden causar sofocos, entre ellos:

  • Comida picante
  • Bebidas con cafeina
  • Alcohol
  • Carnes procesadas como fiambres o salchichas

¿Qué medicamentos pueden causar sofocos?

Algunos medicamentos enumeran los sofocos como un efecto secundario, que incluyen:

  • Antidepresivos (medicamentos para la depresión y otros trastornos de salud mental)
  • Opioides (medicamentos fuertes que se usan para aliviar el dolor)
  • Esteroides (medicamentos para tratar el asma, la artritis y otras formas de inflamación)
  • Medicamentos para la osteoporosis (utilizados para tratar y prevenir la fragilidad de los huesos)
  • Bloqueadores de los canales de calcio (utilizados para tratar la presión arterial alta, la angina de pecho y los latidos cardíacos irregulares)
  • Vasodilatadores (medicamentos para tratar la presión arterial alta)

Cómo tratar los sofocos

Los sofocos se pueden tratar con cambios en el estilo de vida, terapia hormonal y otros medicamentos. La mayoría de las personas primero deben intentar cambios en el estilo de vida, pero si sus síntomas interfieren con su calidad de vida o interrumpen su sueño, debe hablar con su proveedor de atención médica sobre qué medicamentos pueden ayudarlo.

Ajustes de estilo de vida

Los cambios en el estilo de vida para los sofocos se centran en reducir la temperatura una vez que comienzan. Incluyen:

  • Beba un vaso de agua fría o jugo cuando sienta el sofoco.
  • Aplique una compresa fría o una bolsa de hielo en el pecho o la cara durante el sofoco. Si experimenta sudores nocturnos, es posible que desee mantener una compresa fría cerca de su cama.
  • Vístase en capas para que pueda quitarse la ropa cuando comience el sofoco.

También hay pasos que puede seguir para prevenir los sofocos regulando su temperatura a lo largo del día, que incluyen:

  • Controle el estrés, que puede aumentar los sofocos.
  • Evite las comidas picantes, el alcohol, la cafeína, el té caliente y otros alimentos o bebidas que provoquen sofocos.
  • Coma a intervalos regulares y evite las comidas copiosas.
  • Use telas transpirables como el algodón y use material transpirable en su cama.
  • Lleve un diario de los desencadenantes de los sofocos para comprender mejor qué los provoca.

Terapia hormonal

La terapia hormonal es un tratamiento médico que reemplaza el estrógeno perdido durante la menopausia. Esto ayuda a aliviar los síntomas de la menopausia, incluidos los sofocos.

En el pasado, la terapia hormonal se consideraba insegura y estaba relacionada con riesgos para la salud. A partir de 2017, la Sociedad Norteamericana de Menopausia afirmó que los beneficios pueden superar el riesgo para muchas personas, especialmente aquellas que comienzan la terapia antes de los 60 años.

Decidir si continuar con la terapia hormonal es una decisión individualizada. Si está interesado, debe hablar con su proveedor de atención médica sobre los beneficios y riesgos de este tipo de tratamiento.

Otros medicamentos

Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), una clase de antidepresivos, pueden ayudar a tratar los sofocos. Algunos tipos de estos medicamentos incluyen:

  • Celexa (citalopram)
  • Lexapro (escitalopram)
  • Prozac (fluoxetina)
  • Zoloft (sertralina)

Neurontin (gabapentina), un medicamento para las convulsiones, también puede ayudar. Hable con un proveedor de atención médica acerca de si estos son adecuados para usted.

¿Existen pruebas para diagnosticar la causa de los sofocos?

Si es una persona que menstrúa, un proveedor de atención médica puede diagnosticar la perimenopausia (el período anterior a la menopausia) o la menopausia según su edad y el informe de los períodos menstruales. Los niveles sanguíneos de estradiol y hormona estimulante del folículo (FSH) se pueden medir para respaldar un diagnóstico de menopausia.

En algunos casos, un proveedor de atención médica puede buscar condiciones subyacentes menos comunes que podrían producir sofocos o sudores nocturnos. Es posible que realicen análisis de sangre e imágenes para buscar afecciones como tumores o hipertiroidismo (un nivel alto de hormona tiroidea).

Cuándo ver a un proveedor de atención médica

Si experimenta episodios repetidos de sofocos o sudoración nocturna que probablemente no se deban a la perimenopausia o la menopausia, consulte a un proveedor de atención médica.

Si se esperan episodios de sofocos debido a su historial menstrual, consulte a un proveedor de atención médica si son graves o si están afectando su sueño y otros aspectos de la vida.

Resumen

Los sofocos son extremadamente comunes y afectan a aproximadamente las tres cuartas partes de las personas en la menopausia. En su mayoría son inofensivos, pero pueden interrumpir sus actividades diarias y afectar el sueño. Los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a controlar los sofocos, al igual que los medicamentos.

Preguntas frecuentes

  • ¿Cómo deshacerse de los sofocos rápidamente?

    Beber agua fría o jugo al comienzo de un sofoco, usar una compresa fría y quitarse varias capas de ropa son algunas formas de ayudar a deshacerse de los sofocos rápidamente. Recuerde, la mayoría de los sofocos duran menos de cinco minutos.

  • ¿Qué vitaminas ayudan con los sofocos?

    Algunas investigaciones indican que la vitamina B9 (folato) puede reducir los sofocos. Las mujeres han reportado éxito en la reducción de los sofocos usando hierbas como el cohosh negro, pero los beneficios no han sido probados científicamente.

  • ¿Qué puede desencadenar los sofocos?

    El estrés, las emociones y la ansiedad pueden desencadenar sofocos. Lo mismo ocurre con las bebidas calientes, el alcohol, la cafeína y las comidas picantes. Llevar un diario de cuándo ocurren los sofocos lo ayuda a evitar los desencadenantes.

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