Sea consciente de los comportamientos que interrumpen el sueño
El ejercicio es una excelente manera de mantenerse saludable, pero debe evitarse cerca de la hora de acostarse. De lo contrario, puede hacer que su adolescente esté demasiado alerta para quedarse dormido.
Del mismo modo, comer tarde en la noche puede interrumpir el sueño y puede causar acidez estomacal, lo que puede provocar molestias en el pecho y la garganta. La cena o las meriendas deben comerse a la misma hora todos los días y preferiblemente horas antes de irse a dormir.
La cafeína, la nicotina y el alcohol están asociados con el insomnio y los despertares frecuentes que interrumpen el sueño. El chocolate, los refrescos, el té, el café y las bebidas energéticas pueden contener cafeína, un estimulante que aumenta la actividad cerebral. La nicotina se puede encontrar en productos de tabaco, incluidos los que no se fuman.