La diverticulitis es una condición que debe ser diagnosticada por un médico, incluso para aquellos en quienes ha sido un problema en el pasado. En la mayoría de los casos, un historial médico cuidadoso y una tomografía computarizada (TC) abdominal será la forma típica en que la diverticulitis es diagnosticado.
Autocomprobaciones/Pruebas en el hogar
No hay forma de diagnosticar la diverticulitis en casa. Incluso si ya se sabe que los divertículos están presentes porque se encontraron durante una colonoscopia u otra prueba, o incluso si se ha diagnosticado diverticulitis en el pasado, los pacientes no pueden diagnosticar y tratar esta afección por sí mismos.
Cuando se presentan síntomas severos o persistentes de dolor abdominal, fiebre, estreñimiento, diarrea, náuseas o vómitos, es necesario consultar a un médico lo antes posible (incluso en el departamento de emergencias si los síntomas son severos).
Imágenes
Una tomografía computarizada, que a veces también se denomina tomografía computarizada, es la prueba que se usa cuando se sospecha diverticulitis. Una tomografía computarizada es un tipo de radiografía, pero en lugar de una imagen plana, proporciona una serie de imágenes que muestran una vista transversal del cuerpo. Una tomografía computarizada abdominal puede mostrar los órganos y tejidos del tracto digestivo, incluido el intestino grueso, donde se encuentran los divertículos colónicos.
En preparación para una tomografía computarizada, se les pedirá a los pacientes que dejen de comer unas cuatro horas antes del examen y que beban solo agua. El contraste oral, intravenoso y, a veces, rectal se usa con una tomografía computarizada cuando se sospecha diverticulitis. Se pedirá a los pacientes que beban una solución que contenga bario. El bario pasará a través del tracto digestivo y ayudará a iluminar las estructuras internas del cuerpo en las imágenes de tomografía computarizada.
El contraste también se puede administrar por vía rectal, mediante el uso de un enema. Finalmente, habrá contraste intravenoso. Todos estos tipos de contraste ayudarán al profesional de la salud a ver si hay divertículos en el intestino grueso y visualizar otros órganos para poder hacer el diagnóstico de diverticulitis.
Un escáner CT es una máquina grande que tiene una abertura redonda en el medio. Los pacientes se acostarán en una mesa que se desliza hacia la abertura de la máquina durante la prueba. El mecanismo del escáner que toma las radiografías girará para tomar las imágenes. Es necesario permanecer quieto durante la prueba y en puntos, el técnico de radiología le dará instrucciones para contener la respiración.
Cuando se usa contraste intravenoso, se iniciará una vía intravenosa para administrarlo. La prueba en sí no es incómoda, pero puede haber molestias asociadas con recibir una vía intravenosa y un enema de contraste.
Beber contraste también puede ser un desafío para algunos pacientes, lo que puede ser un poco más fácil si el contraste está frío y si lo bebe con una pajilla.
Hacer un seguimiento
Por lo general, se recomienda una colonoscopia unos meses después de que la diverticulitis haya sido tratada con éxito. Esta prueba no se usa para diagnosticar diverticulitis y no se realizará mientras la diverticulitis esté activa debido a posibles complicaciones.
En casos raros, no está claro a partir de la tomografía computarizada abdominal si el diagnóstico es verdaderamente diverticulitis o si también podría estar presente cáncer colorrectal u otra afección. Se puede usar una colonoscopia para asegurarse de que la diverticulitis se haya resuelto y que no haya otras afecciones presentes en el colon.
Se individualizará una colonoscopia de seguimiento y cualquier otra prueba que pueda ser necesaria según la situación del paciente y la preferencia del médico.
Diagnósticos diferenciales
El dolor abdominal se asocia con varias otras afecciones, por lo que es necesario obtener un diagnóstico preciso de diverticulitis antes de comenzar el tratamiento. Además, puede ocurrir más de una condición en el tracto digestivo al mismo tiempo, por lo que es vital encontrar otras razones para el dolor u otros síntomas digestivos como diarrea, estreñimiento o vómitos. Algunos de los diagnósticos diferenciales para la diverticulitis incluyen:
- Apendicitis: Una inflamación del apéndice es una condición común que también causa dolor abdominal en el lado izquierdo. Apendicitis a menudo se considera junto con la diverticulitis y es otra razón por la que un médico podría ordenar una tomografía computarizada.
- Cáncer de colon: Una masa dentro del colon podría causar algunos síntomas similares a la diverticulitis.
- Cáncer de ovarios: El cáncer en los ovarios también puede causar dolor abdominal y un cambio en los hábitos intestinales.
- Enfermedad inflamatoria intestinal (EII): La enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, que son afecciones crónicas del sistema digestivo, también pueden causar dolor abdominal y otros síntomas dentro y fuera del tracto digestivo.