Dolor
El dolor después del tratamiento es un problema frustrante. En general, la contractura de Dupuytren es un problema molesto, pero no doloroso. Sin embargo, hasta el 20 por ciento de las personas reportan un dolor significativo después del tratamiento de la afección.
La mano y los dedos están llenos de terminaciones nerviosas y son propensos a desarrollar molestias después del tratamiento. Por lo general, el dolor se resuelve con el tiempo, pero hay algunas personas que tienen dolor crónico o una afección llamada síndrome de dolor regional complejo que puede causar molestias y discapacidad continuas.
El dolor después del tratamiento de la contractura de Dupuytren a menudo puede mejorar con actividades terapéuticas específicas. Para muchas personas, trabajar con un terapeuta ocupacional o un terapeuta manual puede ser beneficioso. Se trata de personas que tienen un entrenamiento específico y que ayudan a restaurar la función normal de las manos y los dedos. Debido a la compleja interacción de las articulaciones, los tendones, los músculos y otras estructuras, trabajar con alguien que tenga experiencia y pericia en el funcionamiento de las manos puede ayudar a las personas que sufren molestias después del tratamiento de la contractura de Dupuytren.