La vitamina A es una vitamina liposoluble que está naturalmente presente en muchos de los alimentos que comemos. Es importante para un sistema inmunológico fuerte, una visión saludable y la reproducción. La vitamina A también ayuda a que los pulmones, el corazón y los riñones funcionen correctamente.
Los dos tipos de vitamina A que se encuentran en nuestros alimentos son la vitamina A preformada y la provitamina A:
- vitamina A preformada (retinol y ésteres de retinilo) se encuentra en alimentos de origen animal, incluida la carne y los productos lácteos.
- Provitamina A carotenoides se encuentran en alimentos de origen vegetal como frutas y verduras. La forma más común de provitamina A presente en alimentos y suplementos es el betacaroteno.
La deficiencia de vitamina A es inusual en los países desarrollados. A nivel mundial, sin embargo, es una de las deficiencias nutricionales más comunes. Las personas embarazadas y los niños corren el mayor riesgo de sufrir una deficiencia de vitamina A.
La deficiencia de vitamina A generalmente ocurre cuando una persona no consume suficientes alimentos ricos en vitamina A para satisfacer las necesidades requeridas por su cuerpo.
Aunque es raro en países desarrollados como los Estados Unidos, sigue siendo muy común en países de bajos ingresos donde los residentes no tienen acceso a fuentes alimenticias de carotenoides provitamina A y vitamina A preformada.
Signos y síntomas
Dependiendo de la gravedad de la deficiencia, los signos y síntomas pueden variar. El síntoma más común de la deficiencia de vitamina A en mujeres embarazadas y niños es xeroftalmia.
La xeroftalmia es una enfermedad ocular progresiva que generalmente comienza con ojos secos. A menudo progresa a ceguera nocturna o dificultad para ver con poca luz. Si la deficiencia no se trata, puede conducir a la pérdida total de la visión.
Una persona con deficiencia de vitamina A también puede desarrollar manchas de Bitot. Estos aparecen como lesiones oculares sutiles «espumosas» con forma triangular.
Los estudios también muestran que la deficiencia de vitamina A está relacionada con el enfisema y otras enfermedades respiratorias, incluido el asma infantil. Por lo tanto, se recomienda la suplementación de vitamina A en poblaciones de alto riesgo para tratar y prevenir enfermedades pulmonares.
Otros síntomas de una deficiencia de vitamina A incluyen:
- Fatiga
- Aumento de infecciones
- Esterilidad
- Piel y cabello secos
Causas y factores de riesgo
Las personas embarazadas y lactantes, los bebés y los niños pequeños en los países en desarrollo corren el mayor riesgo de deficiencia de vitamina A. Se estima que el 50% de los niños en edad preescolar y las madres embarazadas en todo el mundo están en riesgo.
De hecho, la deficiencia de vitamina A es la principal causa prevenible de ceguera infantil en todo el mundo.
Además, es probable que los bebés prematuros que no tienen reservas adecuadas de vitamina A en el hígado experimenten una deficiencia durante el primer año de vida.
Las condiciones y procedimientos que interfieren con la capacidad del cuerpo para absorber grasa incluyen:
- Cirrosis (cicatrización excesiva del hígado)
- Fibrosis quística (una condición genética que provoca la producción de mucosidad en órganos como los pulmones, el colon y el páncreas)
- Diarrea crónica (diarrea que dura más de unas pocas semanas)
- Cirugía bariátrica (cirugía de pérdida de peso)
- Enfermedad de Crohn (una enfermedad intestinal inflamatoria crónica que puede afectar el tracto gastrointestinal)
Complicaciones
Con el tiempo, la deficiencia de vitamina A puede provocar complicaciones si no se trata.
Además de la pérdida de la visión, los niños con deficiencia de vitamina A corren un mayor riesgo de retraso en el crecimiento o desarrollo.
La deficiencia de vitamina A reduce la capacidad de combatir enfermedades e infecciones. Esto puede conducir a un aumento de la mortalidad en niños con infecciones infantiles comunes.
La deficiencia de vitamina A también se asocia con muertes en el embarazo y otras consecuencias negativas durante el embarazo y la lactancia.
Diagnóstico y Evaluación
La deficiencia de vitamina A es más común si tiene una afección subyacente que lo pone en mayor riesgo de desarrollar una deficiencia de vitaminas liposolubles. Si ese es el caso, debe hacerse exámenes regulares para asegurarse de que no tenga deficiencias de nutrientes.
Si experimenta algún síntoma asociado con la deficiencia de vitamina A, como ceguera nocturna o manchas de Bitot, asegúrese de comunicarse con su proveedor de atención médica lo antes posible para una evaluación.
El diagnóstico de la deficiencia de vitamina A comienza con una visita a su proveedor de atención médica. Completarán un examen completo y verificarán los niveles de retinol en su sangre.
¿Cuáles son los niveles normales de retinol?
Los valores normales oscilan entre 20 y 60 microgramos por decilitro (mcg/dL).
Un nivel de retinol en plasma de menos de 20 microgramos por decilitro refleja una deficiencia de vitamina A.
Tratamiento y Prevención
La mejor manera de prevenir una deficiencia de vitamina A es llevar una dieta bien balanceada y rica en nutrientes. Las raciones dietéticas recomendadas (RDA) para la vitamina A se enumeran en microgramos de equivalentes de actividad de retinol (RAE), lo que considera las diferentes tasas de absorción de ambas formas de vitamina A.
La dosis diaria recomendada para adultos mayores de 19 años es:
- 900 microgramos RAE para hombres
- 700 microgramos RAE para mujeres
- 770 microgramos RAE durante el embarazo
- 1.300 microgramos RAE durante la lactancia
Si le diagnostican deficiencia de vitamina A, su proveedor de atención médica puede pedirle que cambie su dieta para agregar más alimentos ricos en vitamina A. Es posible que le recete un suplemento oral para aumentar los niveles de vitamina A en la sangre hasta que se corrija la deficiencia.
Los suplementos de vitamina A pueden interactuar con ciertos medicamentos. Siempre hable con su proveedor de atención médica o farmacéutico sobre cualquier medicamento de venta libre o suplemento dietético que esté tomando para garantizar la seguridad.
¿Qué alimentos contienen vitamina A?
La vitamina A se encuentra en muchos de los alimentos que comemos. También se agrega a algunos alimentos como cereales, jugos y leche. Para asegurarse de cumplir con la dosis diaria recomendada de vitamina A, es importante consumir una dieta balanceada y saludable.
Alimentos ricos en vitamina A
- Verduras de hojas verdes como la espinaca, la col rizada y el brócoli
- Verduras anaranjadas y amarillas como batatas, zanahorias y calabazas
- Cantalupo
- mango
- albaricoques
- Productos lácteos
- Hígado de res y vísceras
- Salmón
- Huevos
- Tomates
Resumen
Si bien las deficiencias de vitamina A son raras en países desarrollados como los Estados Unidos, todavía existen. Es posible que tenga problemas para absorber los nutrientes debido a un problema de salud subyacente o que experimente síntomas asociados con la deficiencia de vitamina A.
Si es así, es importante llamar a su proveedor de atención médica para una evaluación completa y un análisis de sangre.
Para la mayoría de las personas, llevar una dieta saludable en general garantizará que satisfagan sus necesidades diarias de vitamina A para prevenir una deficiencia. Asegúrese de que su dieta sea rica en frutas, verduras, cereales integrales, proteínas magras y grasas saludables.
Otros, sin embargo, pueden requerir suplementos de vitamina A por vía oral hasta que los niveles vuelvan a la normalidad.