La artritis séptica es una infección en una articulación. La infección puede ser causada por bacterias, virus, hongos o parásitos. La infección articular causada por hongos o parásitos es mucho menos común que la causada por bacterias o virus. Por lo general, la artritis séptica afecta una sola articulación grande, como la rodilla o la cadera, pero es posible que se infecten varias articulaciones.
La artritis séptica también se conoce como artritis infecciosa. La artritis séptica se considera una emergencia médica debido al daño grave que puede ocurrir en los huesos y cartílagos. La artritis séptica puede causar un shock séptico, que puede ser fatal.
Causas
Una infección de artritis séptica puede originarse en cualquier parte del cuerpo. La infección también puede comenzar como resultado de una herida abierta, una cirugía o inyecciones no esterilizadas. Cualquiera que sea la fuente inicial de infección, la artritis séptica ocurre cuando el organismo infeccioso ingresa a la articulación.
Síntomas
Diagnóstico
Después de considerar su historial médico y examen físico, su proveedor de atención médica ordenará ciertas pruebas. Las pruebas utilizadas para diagnosticar la artritis séptica incluyen:
- Exámenes de sangre para identificar un recuento elevado de glóbulos blancos y bacterias
- Radiografías u otros estudios por imágenes para evaluar el daño articular
- Artrocentesis, o aspiración articular, usando una aguja para extraer y luego analizar el líquido sinovial (articulación) en busca de varios parámetros que podrían indicar infección
Tratamiento
Para la artritis séptica bacteriana, es necesario identificar las bacterias específicas que causan la infección. Una vez que se identifica la bacteria, puede comenzar a tomar los antibióticos apropiados. Los antibióticos que matan a las bacterias generalmente se toman por vía oral o intravenosa (IV, a través de una vena) durante cuatro a seis semanas; sin embargo, una nueva investigación sugiere que una duración más corta de antibióticos de dos semanas puede ser igual de efectiva.
También es posible que necesite drenar el espacio articular infectado, ya sea mediante artrocentesis, irrigación quirúrgica (lavado de la articulación con soluciones estériles) o desbridamiento (extracción del tejido en descomposición). La artritis séptica puede provocar un daño articular significativo y, eventualmente, podría conducir a una cirugía de reemplazo articular.
Factores de riesgo
Ciertos factores aumentan el riesgo de desarrollar artritis séptica. Esos incluyen:
- Problemas articulares previos por otros tipos de artritis, cirugía articular o lesión articular
- Un sistema inmunitario debilitado por enfermedades o por tomar medicamentos inmunosupresores
- Heridas en la piel o heridas abiertas que permiten el acceso de bacterias al cuerpo.
- Uso de drogas inyectables y alcoholismo asociado con alto riesgo de infección
Predominio
La artritis séptica puede afectar a cualquier persona a cualquier edad, incluidos bebés y niños, aunque es más común en bebés y adultos mayores. En los adultos, las articulaciones que soportan peso (caderas, rodillas, tobillos) son las más afectadas. En los niños, las caderas se ven comúnmente afectadas. A medida que la población envejece, los proveedores de atención médica atienden a más pacientes con artritis séptica.
Puntos de interés
Recuerde, busque atención médica inmediata si tiene signos o síntomas que apuntan a la artritis séptica.