El cáncer de laringe es un tipo de cáncer que afecta a la laringe, el órgano que comúnmente conocemos como laringe. Alrededor de 12.500 estadounidenses son diagnosticados con cáncer de laringe cada año, de los cuales se estima que 3.500 morirán a causa de la enfermedad.
Anatomía
La laringe contiene las cuerdas vocales y se divide en tres partes:
- la glotis, las verdaderas cuerdas vocales, alrededor de las cuales se desarrolla el 60 por ciento de los cánceres
- la supraglotis, situada encima de la glotis, donde ocurre el 35 por ciento de los cánceres
- la subglotis, situada justo debajo de la glotis
La ubicación de un tumor puede producir diferentes síntomas y requerir diferentes enfoques de tratamiento.
Síntomas
Otros síntomas pueden incluir:
- dificultad para tragar (disfagia)
- dolor o ardor al tragar
- la sensación de que la comida se atasca en la garganta
- una tos persistente no relacionada con un resfriado o alergia y que dura más de ocho semanas
- un bulto en el cuello alrededor de la laringe
- dolor de garganta
- dolores de oído
- atragantarse con la comida
- mal aliento persistente (halitosis)
- pérdida de peso involuntaria de más del cinco por ciento en un período de 12 meses
El tamaño y la ubicación del tumor son los factores más importantes para determinar qué síntomas puede experimentar una persona. Si se desarrolla un tumor en las cuerdas vocales, es común un cambio en la voz y ronquera. Cuando los tumores se desarrollan por encima o por debajo de las cuerdas vocales, pueden presentarse diferentes síntomas, como dolor de oído o dificultad para respirar.
Factores de riesgo
Si bien no conocemos la causa exacta del cáncer de laringe, sí sabemos cuáles son los factores de riesgo más comunes. El cáncer de laringe es uno de los muchos tipos de cáncer relacionados con el tabaquismo.
Si bien puede ocurrir en los no fumadores, la evidencia ha colocado firmemente a los cigarrillos como el único factor de riesgo más alto para la enfermedad. Fumar y el consumo excesivo de alcohol juntos aumentan el riesgo aún más.
Entre los otros factores clave:
- edad avanzada (45 años o más)
- género masculino (debido en parte a las tasas más altas de tabaquismo en los hombres)
- antecedentes de cáncer de cabeza y cuello (incluida la exposición a radiación en la cabeza o el cuello)
- consumo excesivo de alcohol
- exposición ocupacional a asbesto, carbón o formaldehído
- dietas ricas en carne y/o carne procesada
- genética e historia familiar
- inmunosupresión, incluidos los receptores de órganos y las personas con VIH
- raza (más afroamericanos contraen cáncer de laringe que blancos)
Riesgo de ERGE, VPH y cáncer de laringe
Algunos estudios han relacionado el cáncer de laringe con la enfermedad por reflujo gastrointestinal (ERGE). Si bien la asociación todavía se considera controvertida, incluso la Sociedad Estadounidense del Cáncer ha eludido el impacto del reflujo ácido persistente en el cáncer de laringe.
De manera similar, el virus del papiloma humano (VPH), un virus relacionado con más del 95 por ciento de los casos de cáncer de cuello uterino, también puede aumentar el riesgo de cáncer de laringe. Si bien algunos grupos consideran que el riesgo es bajo, otros estudios han demostrado que el 25 por ciento de los carcinomas de laringe albergan una infección por VPH (incluidos los tipos de VPH de alto riesgo 16 y 18).
Diagnóstico
El cáncer de laringe se diagnostica realizando primero un examen físico para palpar cualquier bulto en el cuello. Para ver mejor el interior, el proveedor de atención médica puede recomendar una laringoscopia indirecta o directa:
- Un La laringoscopia indirecta implica un instrumento de mango largo con un espejo que se inserta en la boca para obtener una mirada indirecta de la laringe.
- En una laringoscopia directa, se puede tomar una muestra de tejido (biopsia) si se encuentra algo sospechoso. Este procedimiento se realiza bajo anestesia general para que se pueda inspeccionar bien toda la zona.
Otras técnicas de investigación incluyen imágenes por resonancia magnética (IRM), tomografía computarizada (TC), un trago de bario de rayos X o tomografía por emisión de positrones (PET).
Puesta en escena
Si se encuentra cáncer, su proveedor de atención médica tratará de identificar el tamaño y la extensión del cáncer. Este es un proceso llamado puesta en escena. El estadio del cáncer de laringe ayudará a determinar el enfoque de tratamiento más apropiado para usted como individuo.
Los proveedores de atención médica hacen esto utilizando primero el sistema TNM. En este sistema:
- T significa tumor y representa el tamaño de su tumor que va desde T1 (que afecta una porción más pequeña de la laringe) hasta T4 (que se extiende más allá de la laringe).
- N significa ganglio linfático y representa la cantidad de cáncer presente en sus ganglios linfáticos, desde N0 (sin cáncer) hasta N3 (que se propaga más allá de los ganglios linfáticos).
- M significa metástasis y representa qué tan lejos se ha propagado el cáncer (metástasis) a órganos distantes que van desde M0 (sin metástasis) a M1 (metástasis).
Con base en esta evaluación, a su cáncer se le asignaría una etapa:
- El estadio 0 (o carcinoma in situ) son cánceres considerados no invasivos.
- La etapa I son cánceres ubicados en una parte del cuerpo.
- La etapa 2 son cánceres que están localizados pero avanzados.
- La etapa 3 son cánceres que también están localizados y avanzados, pero se consideran más graves.
- La etapa 4 son cánceres que han hecho metástasis.
Tratamiento
La cirugía y la radioterapia son los métodos estándar de tratamiento para el cáncer de laringe. Estos pueden incluir los siguientes procedimientos quirúrgicos:
- laringectomía total, la extirpación quirúrgica de toda la laringe (que puede dejar a la persona incapaz de hablar sin un dispositivo mecánico)
- laringectomía parcial que implica la extirpación quirúrgica del área afectada de la laringe
- laringectomía supraglótica que implica la extirpación quirúrgica de la laringe por encima de las cuerdas vocales
- cordectomía que implica la extirpación quirúrgica de una o ambas cuerdas vocales
Otros procedimientos incluyen:
- la radioterapia se administra como tratamiento primario o se usa después de la cirugía para eliminar las células cancerosas restantes
- disección de los ganglios linfáticos que implica la extirpación quirúrgica de los ganglios linfáticos cerca del sitio de la malignidad
- la quimioterapia generalmente se usa como terapia neoadyuvante (para reducir el tamaño de un tumor antes de la cirugía) o como terapia adyuvante (para eliminar las células cancerosas restantes después de la cirugía)
Los resultados pueden variar de persona a persona. La regla general es que cuanto antes se le diagnostique y trate, mayores serán las posibilidades de curarse. La enfermedad en etapa temprana incluye cánceres en etapa 1, 2 y 3.
Albardilla
Ser diagnosticado con cáncer puede cambiar su vida incluso en las primeras etapas de la enfermedad. Pide ayuda y permite que la gente te ayude. Ponte en contacto con los demás. Considere unirse a un grupo de apoyo para el cáncer, ya sea en un centro comunitario o en línea.
La medicina está cambiando rápidamente y convertirse en su propio defensor no solo lo ayuda a sentirse más en control, sino que también puede ayudarlo a tomar mejores decisiones sobre su salud. Esto incluye los tipos de tratamiento que elija.
Decidir si someterse a una cirugía, o incluso el alcance de su cirugía, es una elección muy personal. La calidad de vida puede verse afectada, por lo que es importante dedicar tanto tiempo a aprender sobre su enfermedad y lo que se necesita para curarla. Lo más importante es hacer una elección informada basada en su mejor comprensión de sus opciones.