Un neumotórax es un tipo de pulmón colapsado donde el aire se acumula dentro de la cavidad torácica, entre los pulmones y la pared torácica. Un neumotórax, a veces llamado simplemente "neumo", puede ser leve o grave dependiendo de la cantidad de aire presente.
Un neumotórax puede ser causado por aire que ingresa al tórax desde fuera del cuerpo o desde los propios pulmones. En la NICU, la mayoría de los neumonías ocurren cuando el aire del interior de los pulmones se escapa. Un neumotórax es sólo un tipo de fuga de aire. Si el aire va a otro lugar que no sea la cavidad torácica, la fuga de aire tiene un nombre diferente.
Causas
Un neumotórax u otra fuga de aire se desarrolla cuando los alvéolos, los pequeños sacos de aire en los pulmones donde se intercambia el oxígeno y el dióxido de carbono, explotan. Cuando los alvéolos estallan, el aire se escapa y provoca una fuga de aire.
Los bebés tienen pulmones muy frágiles y muchas cosas pueden aumentar el riesgo de que un bebé sufra neumotórax u otras fugas de aire. Aunque algunos bebés corren mayor riesgo que otros, cualquier recién nacido puede desarrollar neumonía a medida que sus pulmones se expanden después del nacimiento. Los factores de riesgo que le dan a su bebé una mayor probabilidad de desarrollar neumonía incluyen:
- Nacimiento prematuro: Los bebés prematuros tienen tejido pulmonar muy frágil y sus alvéolos se rompen fácilmente. Los bebés que pesan menos de 1500 g (3 lb 5 oz) al nacer corren mayor riesgo.
- Ayuda para respirar al nacer: Cuando los bebés no respiran inmediatamente después del nacimiento, el equipo de reanimación utilizará una bolsa ambu u otro dispositivo para realizar respiraciones manuales hasta que el bebé comience a respirar. Aunque es necesaria, esta ayuda para respirar puede provocar un neumo.
- Ventilación mecánica: Los bebés que necesitan ayuda prolongada para respirar, ya sea mediante un ventilador o CPAP, tienen un mayor riesgo de sufrir neumonía. Esto se debe a que la ventilación mecánica fuerza el ingreso de aire a los pulmones para mantenerlos inflados y mantener altos los niveles de oxígeno del bebé.
- Aspiración de meconio: Los bebés que respiran meconio durante el proceso del parto pueden enfermarse gravemente. El meconio puede obstruir las vías respiratorias, permitiendo que el aire entre pero no salga de los pulmones. Este atrapamiento de aire puede aumentar la presión en los alvéolos y provocar que exploten.
Tratamiento
Si los médicos creen que su bebé tiene neumonía, le harán una radiografía de tórax para confirmar su diagnóstico. Si no hay rayos X disponibles, es posible que apunten una luz a través del pecho de su bebé (transiluminación) para buscar puntos brillantes donde se ha acumulado aire.
El tratamiento para las fugas de aire depende de la gravedad de los síntomas y del tamaño de la fuga de aire. Es posible que los bebés con pequeñas fugas no presenten ningún síntoma y no requieran tratamiento. La fuga sanará por sí sola y el cuerpo reabsorberá el aire.
Un neumo grande puede causar que el bebé tenga importantes problemas para respirar. La acumulación de aire puede hacer que el corazón, los vasos sanguíneos principales y la tráquea salgan de su posición correcta y puede convertirse en una emergencia médica. El tratamiento se basa en la gravedad de los síntomas y puede incluir:
- Oxígeno suplementario: En algunos casos, darle al bebé oxígeno al 100% puede ayudar al cuerpo a reabsorber el aire de un neumo. Esta técnica sólo se utiliza en bebés a término debido al riesgo de ROP en los prematuros.
- Aspiración con aguja: Se puede insertar una aguja conectada a una jeringa a través de la pared torácica y usarla para extraer el aire acumulado. Luego se retira esta aguja y se venda la piel.
- Tubo torácico: En el neumotórax grave o en bebés prematuros conectados a un ventilador, a menudo se utiliza un tubo torácico para extraer el aire hasta que se haya resuelto la fuga de aire. Se insertará un tubo de plástico delgado en el pecho del bebé, se asegurará y luego se conectará a la succión. La succión eliminará el aire a medida que se acumula. El tubo torácico se retirará después de que se haya eliminado todo el aire adicional y la fuga haya sanado.
Después de tratar un neumotórax, los médicos repetirán una radiografía de tórax para asegurarse de que la fuga haya sanado y que no se haya acumulado aire nuevo.