Las enfermedades respiratorias más comunes son asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, fibrosis quística, cáncer de pulmón, tuberculosis, bronquitis, neumonía y enfisema.
Algunas enfermedades respiratorias son agudas, como una infección que mejorará con tratamiento, mientras que otras son crónicas o se vuelven crónicas y deben controlarse.
Muchos tipos de enfermedades pulmonares pueden causar afecciones respiratorias crónicas. La enfermedad respiratoria crónica afecta a millones de personas solo en los Estados Unidos. Puede ser difícil decir cuántas personas tienen enfermedades pulmonares en general porque estas enfermedades se agrupan en condiciones específicas.
Muchos factores genéticos y ambientales pueden provocar enfermedades pulmonares, pero fumar es la principal causa prevenible de muchas afecciones respiratorias.
Este artículo analizará las ocho enfermedades respiratorias más comunes, sus síntomas y sus causas.
Asma
El asma afecta a 25 millones de personas en los Estados Unidos. Las personas con antecedentes familiares de asma, alergias respiratorias o enfermedades respiratorias infantiles graves tienen un mayor riesgo de desarrollar asma.
El asma es una enfermedad inflamatoria crónica que causa problemas respiratorios cuando las vías respiratorias se estrechan debido a la inflamación o se obstruyen con mucosidad. La gravedad de la afección varía de una persona a otra, pero la mayoría de las personas toman medicamentos preventivos diarios para controlar los síntomas y prevenir los brotes.
Síntomas
El asma puede tener varios síntomas, entre ellos:
- sibilancias
- tos
- Opresión en el pecho
- Dificultad para respirar
Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es un término general que se usa para describir dos tipos principales de enfermedad pulmonar obstructiva que solían clasificarse por separado: enfisema y bronquitis crónica.
- Enfisema se desarrolla cuando los diminutos sacos de aire en los pulmones (alvéolos) se dañan y se vuelven menos elásticos. Esto reduce la capacidad de los sacos para mover oxígeno y otros gases entre el aire que se respira y la sangre. Esto puede provocar una falta de oxígeno en la sangre (hipoxia) y una acumulación de productos de desecho tóxicos.
- Bronquitis crónica Es una condición en la que el revestimiento de los bronquios se irrita e inflama. La hinchazón puede dificultar la respiración y causar una sobreproducción de mucosidad.
Casi 15 millones de personas han sido diagnosticadas con EPOC en los Estados Unidos, y se cree que otros 12 millones tienen la enfermedad pero no tienen un diagnóstico oficial.
La EPOC es la cuarta causa principal de muerte en los Estados Unidos. Alrededor de ocho de cada 10 casos están relacionados con la exposición al humo del cigarrillo.
Síntomas
Los síntomas de la EPOC varían según el tipo que tenga. Los síntomas comunes pueden incluir:
- Tos frecuente o crónica.
- Una tos que produce mucha mucosidad.
- sibilancias
- Un chirrido o silbido al respirar
- Dificultad para respirar que empeora con la actividad
- Opresión en el pecho
- Sensibilidad a infecciones respiratorias como resfriados o gripe.
- Pérdida de peso
- Debilidad
- Hinchazón en las piernas y los pies
- Un tinte azul en los labios o las uñas (cianosis)
Fibrosis quística
La fibrosis quística (FQ) es una condición genética que afecta a unas 35.000 personas en los Estados Unidos. Puede causar problemas respiratorios y digestivos porque la enfermedad hace que la mucosidad del cuerpo sea muy espesa.
Si bien la enfermedad puede afectar varios órganos, tiende a causar problemas específicos en los pulmones, como obstrucciones por moco espeso que atrapa bacterias dañinas y provoca infecciones.
El diagnóstico de FQ generalmente se hace temprano en la vida porque los recién nacidos en los Estados Unidos son examinados para detectar la enfermedad. Si no se realiza un diagnóstico al nacer, los síntomas que se presentan en la niñez pueden conducir al diagnóstico más adelante.
Síntomas
Dado que la fibrosis quística puede afectar muchas partes del cuerpo, se puede desarrollar una amplia gama de síntomas, como:
- Una tos que no desaparece
- Una tos que produce moco espeso o sangre.
- sibilancias
- Dificultad para respirar
- Infecciones respiratorias o sinusales frecuentes
- Pólipos nasales
- Crecimiento lento en la infancia o poco aumento de peso
- Constipación
- Heces grasosas o malolientes
Cáncer de pulmón
El cáncer de pulmón es uno de los tipos de cáncer más comunes y ocupa el tercer lugar en los Estados Unidos con más de 218,000 personas afectadas. Puede desarrollarse como cáncer de pulmón de células pequeñas o cáncer de pulmón de células no pequeñas, que es el más común de los dos.
Fumar cigarrillos, tanto directo como de segunda mano, es uno de los mayores factores de riesgo para el cáncer de pulmón.
Síntomas
El cáncer de pulmón puede desarrollarse gradualmente y, a menudo, sin síntomas. Cuando aparece, los síntomas pueden incluir:
- Dolor en el pecho
- Tos crónica
- Respiración dificultosa
- sibilancias
- Ronquera
- Pérdida de peso
- fatiga o debilidad
- Dificultad para tragar
- Una tos que produce mucosidad sanguinolenta
- Hinchazón en la cara o el cuello
Tuberculosis
La tuberculosis es una enfermedad pulmonar bacteriana causada por Tuberculosis micobacteriana. Más de 1.800 millones de personas en todo el mundo tienen tuberculosis, pero la enfermedad solo se considera activa en 10 millones de ellos.
Las personas con sistemas inmunológicos fuertes a veces portan una forma inactiva de la enfermedad, llamada tuberculosis latente. En personas con sistemas inmunitarios más débiles, la bacteria ataca el tejido pulmonar. También puede propagarse y causar daño a otras partes del cuerpo.
Síntomas
Muchas enfermedades respiratorias comparten síntomas, como la tos prolongada. Ciertos síntomas son específicos de una enfermedad u otra. Por ejemplo, los sudores nocturnos tienden a ocurrir en personas con tuberculosis.
Otros síntomas de la tuberculosis incluyen:
- Una tos que dura más de tres semanas.
- Pérdida de peso
- Poco apetito
- Una tos que produce sangre o mucosidad.
- Debilidad
- Fatiga
- Fiebre
- Sudores nocturnos
Bronquitis
La bronquitis es una afección que se desarrolla cuando la tráquea (tubo bronquial) se irrita o inflama. En respuesta a la inflamación, el revestimiento del tubo bronquial puede producir demasiada mucosidad mientras trata de cubrir el área. La mucosidad puede dificultar la respiración.
La inflamación también puede causar hinchazón de las vías respiratorias. Esto hará que se estreche y dificultará la respiración.
La bronquitis puede ser aguda o crónica. Hay algunas diferencias clave entre las dos formas:
- En la bronquitis aguda, la inflamación generalmente es causada por una infección que mejorará en unos pocos días o varias semanas.
- Con la bronquitis crónica, la inflamación es causada por la exposición repetida a irritantes, como el humo del cigarrillo o la contaminación. La bronquitis crónica no desaparece. Puede tener períodos de alivio junto con períodos en los que empeora (exacerbaciones), especialmente si tiene un resfriado u otra infección respiratoria.
Síntomas
La bronquitis crónica cae bajo el paraguas de la EPOC. La bronquitis aguda no se considera EPOC, pero comparte síntomas con la forma crónica de la enfermedad. Estos síntomas incluyen:
- Una tos frecuente que produce mucosidad.
- sibilancias
- Un silbido o chirrido cuando respira
- Dificultad para respirar (especialmente con la actividad)
- Opresión en el pecho
- Fiebre (solo bronquitis aguda)
Neumonía
La neumonía es un diagnóstico genérico. Aunque existen diferentes tipos de neumonía, la forma en que la condición afecta los pulmones es similar en cada uno.
Con la neumonía, un virus, una bacteria u otro agente infeccioso hace que los diminutos sacos de aire de los pulmones (alvéolos) se llenen de líquido o pus. Estos sacos de aire son los que ayudan a intercambiar oxígeno y otros gases entre el aire que se respira y la sangre. Cuando estos sacos se llenan de líquido, se reduce la capacidad del cuerpo para intercambiar gases.
Los varios tipos de neumonía son:
- Viral
- Bacteriano
- Micoplasma (también llamado “neumonía ambulante”)
- hongos
- Aspiración
Síntomas
En algunos tipos de neumonía, como la neumonía andante, los síntomas pueden ser leves y no afectar las actividades diarias. Sin embargo, los síntomas de la neumonía pueden ser graves y, en algunos casos, requerirán hospitalización.
Los síntomas comunes de la neumonía son:
- Fiebre
- Escalofríos
- Una tos que produce flema
- Dificultad para respirar
- Dolor en el pecho al toser o respirar
- Náuseas
- vómitos
- Diarrea
Enfisema
El enfisema es un tipo de EPOC eso ocurre cuando los diminutos sacos de aire (alvéolos) en los pulmones pierden su elasticidad. Estos sacos están hechos para inflarse, encogerse y estirarse con cada respiración, lo que permite que el aire entre y salga de ellos.
Si tiene enfisema, estos sacos se han dañado y no pueden estirarse cuando respira. A medida que estos sacos de aire se dañan y mueren, sus pulmones tienen menos partes activas para mover el oxígeno del aire que respira hacia la sangre.
Fumar es uno de los principales contribuyentes al enfisema, pero la exposición a otros contaminantes y productos químicos también puede causarlo. La edad y la obesidad también son factores de riesgo para el enfisema.
Síntomas
Con el enfisema temprano, es posible que no note ningún síntoma. A medida que la enfermedad progresa, los síntomas pueden volverse más severos y pueden incluir:
- tos frecuente
- Una tos que produce mucha mucosidad.
- sibilancias
- Dificultad para respirar que empeora con la actividad
- Un silbido o chirrido cuando respira
- Opresión en el pecho
Resumen
Hay varios tipos de enfermedades pulmonares que pueden afectar su respiración y causar síntomas crónicos como tos. Muchas de estas enfermedades comparten síntomas.
Si tiene una tos que no desaparece o experimenta dificultad para respirar con frecuencia, llame a su médico. Pueden hacer pruebas para confirmar qué tipo de enfermedad pulmonar está causando sus problemas respiratorios y pueden derivarlo a un médico que trate específicamente la enfermedad pulmonar (neumólogo).