Prurigo nodular es una afección crónica de la piel caracterizada por picazón y protuberancias o nódulos duros, que forman una erupción simétrica. El prurigo puede estar en cualquier parte del cuerpo, pero a menudo se concentra en los brazos, las piernas, la espalda o el abdomen. Los síntomas pueden variar de leves a severos. El prurigo leve puede parecer solo unos pocos bultos que pican, mientras que el prurigo severo puede provocar varios cientos. Las protuberancias pueden ser del color de su piel, rosadas, rojas o marrón negruzcas.
Este artículo cubrirá las causas del prurigo, los síntomas, el diagnóstico y los tratamientos disponibles.
Causas del prurigo
Se desconoce la causa exacta del prurigo, pero está asociado con la disfunción de las células nerviosas y del sistema inmunitario. La piel de las personas con prurigo tiende a tener más células inmunitarias y fibras nerviosas densas que causan picazón que las personas sin prurigo. El prurigo puede ocurrir de forma independiente o junto con otras afecciones de la piel.
Factores de riesgo
Prurigo también se asocia con los siguientes factores de riesgo:
La picazón en la piel puede comenzar hasta seis meses antes de que aparezcan nódulos de prurigo (protuberancias con picazón) en la piel. La incomodidad asociada con esta condición lleva a rascarse y crea cambios en la piel que pueden aumentar el riesgo de infección. Otros síntomas del prurigo incluyen:
- Ardor o escozor
- Cambios en la piel, como decoloración o cicatrices por rascarse
El prurigo leve puede alterar el funcionamiento diario. La Academia Estadounidense de Dermatología dice que los siguientes son todos los posibles efectos de tener prurigo.
- Problemas para dormir (debido a picazón o molestias)
- Días perdidos de la escuela o el trabajo
- Sentimientos de vergüenza, tristeza.
- Limitar las actividades sociales
- Cambio de planes de vida (como jubilarse temprano)
Cuándo ver a un proveedor de atención médica
Si tiene síntomas de prurigo, especialmente aquellos que interrumpen su rutina diaria, considere consultar a un proveedor de atención médica para determinar si el prurigo es la causa y discutir los próximos pasos. Cuanto antes obtenga un diagnóstico preciso, más rápido podrá encontrar el método adecuado de tratamiento y alivio.
Diagnóstico de prurigo
El diagnóstico de prurigo implica un examen realizado por un proveedor de atención médica o un especialista de la piel como un dermatólogo. Este examen puede incluir una evaluación visual del tamaño, el color y la extensión de los nódulos de la piel o una biopsia de la piel, lo que le permite a su proveedor de atención médica observar de cerca los nódulos bajo un microscopio.
Puede ser útil para su proveedor de atención médica saber cuándo comenzaron los síntomas y qué tipos de tratamiento ha probado. Considere llevar un diario de síntomas para discutirlo con su proveedor de atención médica.
Si una biopsia de piel confirma el prurigo, puede esperar pruebas de seguimiento para determinar la posible causa. Las pruebas pueden incluir:
Tratamiento
Incluso los casos leves de prurigo requieren tratamiento clínico, ya que es poco probable que desaparezca por sí solo. El tratamiento dependerá de la causa subyacente. Por ejemplo, si tiene prurigo debido a una infección bacteriana, el tratamiento se centrará en resolver la infección.
Dupixent (dupilumab) es el primer y único medicamento aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para el tratamiento de adultos con prurigo nodular. Además, existen opciones que se usan fuera de la etiqueta para tratar otros trastornos de la piel y del sistema inmunitario que su proveedor de atención médica puede recomendar, que incluyen:
- Elidel (pimecrolimús)
- Protopic (tacrolimus)
- Dovonex (calcipotriol)
Se puede aplicar crema contra la picazón en la piel para reducir la necesidad de rascarse. Los medicamentos tópicos pueden incluir cremas con corticosteroides. En algunos casos, los corticosteroides pueden inyectarse directamente en la piel.
Su proveedor de atención médica podría recomendarle tratamientos alternativos, como criocirugía o fototerapia (fototerapia).
Los ajustes de comportamiento son otra opción que puede ayudar a reducir la sequedad y el rascado de la piel. Los tratamientos incluyen:
- Mantener las uñas recortadas
- usando mangas largas
- Cubrirse los dedos con guantes
- golpes de vendaje
- Limpieza de la piel con limpiadores suaves
- Mantener la piel hidratada
- Evitar ambientes cálidos para reducir la sudoración.
Resumen
El prurigo leve es una afección crónica de la piel que causa picazón y protuberancias en la piel llamadas nódulos. Las causas están asociadas con la disfunción de las células nerviosas y del sistema inmunitario. El diagnóstico dependerá de los resultados de un examen y una biopsia de piel. El tratamiento varía según la causa subyacente, pero puede incluir medicamentos o cambios de comportamiento para ayudar a reducir la picazón y la capacidad de rascarse.
Una palabra de MEDSALUD
Las condiciones de la piel pueden ser mental y físicamente preocupantes. La picazón y los bultos en la piel pueden sentirse fuera de control o difíciles de manejar. Seguir un plan de cuidado personal puede mejorar la eficacia de un tratamiento y lo bien que se siente. Si experimenta vergüenza, vergüenza, frustración, enojo o tiene ganas de esconderse de los demás, es posible que desee considerar comunicarse con un profesional de la salud mental. Ellos puede ayudarlo a procesar estos sentimientos y desarrollar estrategias de afrontamiento.